
El debate presidencial celebrado el pasado 8 de octubre en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires tuvo luces y sombras.
Por un lado, cumplió con la función de entretener al electorado. Prueba de ello es el nivel de rating que alcanzó en televisión con picos cercanos a los 39 puntos (1).
Pero, por otro lado, careció de propuestas concretas que explicasen cómo solucionar los problemas que arrastra la Argentina. Abundó asimismo en chicanas y agresiones (2).
A primera vista, la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, parecería ser “la ganadora” del debate. Se mostró mucho más activa que el resto de los candidatos, a la vez que buscó ganar en protagonismo atacando y arrinconando a sus competidores directos, Javier Milei y Sergio Massa.
El ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, se concentró, en cambio, en desarrollar sus propuestas de gobierno, a la vez que explicar y difundir las medidas que viene tomando desde el ministerio de Economía.
Javier Milei, por su parte, procuró con mas tranquilidad que vehemencia señalar la dirección del cambio que buscaría imprimirle a la Argentina a partir del 10 de diciembre. Sin entrar en grandes detalles, el cambio radical es su norte.
Juan Schiaretti, gobernador de Córdoba y candidato por el frente Hacemos por Nuestro País, hizo énfasis, una vez más, en las medidas implementadas en su provincia, muchas de las cuales buscaría llevar a cabo a escala nacional en caso de alcanzar la presidencia.
Por último, Myriam Bregman, la candidata del Frente de Izquierda, arremetió contra “la derecha”, señalándola como la responsable de la crisis económica argentina.
La importancia del debate presidencial para las elecciones
Los debates presidenciales no suelen tener, en general, un impacto en la intención de voto del electorado. Parecería ser que los candidatos tienen más para perder que para ganar.
El impacto del debate presidencial en la Argentina fue marginal. No existió un claro ganador que pueda sacar provecho electoral. Así como no existió un ganador, tampoco hubo un perdedor, o sea, alguien que cometiera errores tales que pudiesen condicionar negativamente su performance en las elecciones.
A falta de propuestas concretas, el debate les permitió a los candidatos reforzar el mensaje dirigido a su electorado núcleo. En otras palabras, le brindó a los candidatos la posibilidad de suministrarles a sus votantes tradicionales nuevos argumentos con los que defender su voto ante terceros. Pero, en ningún caso, les sirvió para sumar nuevos electores.
En realidad, el impacto del debate por sí solo, como mencioné anteriormente, es marginal. Esto quiere decir que no es relevante por sí mismo para cambiar los números de la elección.
Debate presidencial: Milei, Bregman y los votantes de Grabois
El particular y sostenido ida y vuelta entre los candidatos Javier Milei y Myriam Bregman a lo largo del debate es, quizás, el fenómeno más destacable de la jornada de domingo.
Al respecto, me gustaría desarrollar las siguientes reflexiones:
1)Además de correr a un lado al peronismo (como pocas veces en la historia argentina desde 1946), lograron poner en el centro del debate a las dos ideologías más importantes del siglo XX: el socialismo y el liberalismo.
Este debate de ideas, propio del período de la Guerra Fría, había estado eclipsado en Argentina por la aparición y resiliencia del peronismo, quien logró captar y enamorar durante muchísimo tiempo al electorado de izquierda (y en menor medida al de la derecha).
Si bien estos intercambios ya habían existido con anterioridad, el segundo debate presidencial los puso en el centro de la atención.
Independientemente de quién haya resultado ganador, el debate en torno a “capitalismo si o capitalismo no” es bienvenido, dado que contribuye a la salud del sistema político en su conjunto.
2)Myriam Bregman podría aprovechar esta situación al ganar notoriamente en protagonismo. Pero hay que señalar que protagonismo no es sinónimo de éxito.
La candidata a presidente por el Frente de Izquierda podría salir beneficiada de la actual crisis económica del país si es capaz de atraer y convencer a los votantes que se inclinaron por Juan Grabois en la interna del oficialismo a que la voten a ella el 22 de octubre.
Aunque quienes votaron por Grabois votaron a la coalición de gobierno, el hecho de que Sergio Massa no sea un candidato que los represente de manera fidedigna podría, bajo determinadas condiciones, inclinar a los votantes de Grabois a votar a Bregman.
Sí es así, Sergio Massa podría no entrar finalmente en el ballotage. Es una posibilidad. Qué tan probable es dependería fundamentalmente de cuatro factores:
Factor A) El agravamiento de la crisis económica previo a las elecciones (cuanto peor el país, mejor para la oposición)
Factor B) Lo que Myriam Bregman pueda llegar a decir o hacer de aquí hasta el próximo domingo
Factor C) El papel que pueda cumplir en este sentido Juan Grabois
Factor D) La capacidad de respuesta rápida del ministro-candidato, Sergio Massa
Conclusión final
Como se puede ver, el debate presidencial no tendrá un impacto directo en el resultado electoral, pero podría tener efectos indirectos si Myriam Bregman y su Frente de Izquierda son capaces de capitalizar la oportunidad que se les presenta en un contexto de caos e incertidumbre.
Esa oportunidad consistiría en convencer a los votantes de izquierda de Juan Grabois en la interna de de redirigir ahora su voto hacia el Frente de Izquierda.
En el actual escenario de crisis, quien sale mejor parada es la oposición, por lo que el gobierno deberá esforzarse sobremanera para retener los votos conseguidos en agosto, convencer a los nuevos votantes de adherir a su propuesta y terminar de inclinar en su favor a aquellos votantes que eligieron una propuesta electoral que no alcanzó el umbral mínimo de votos (1,5% en la elección pasada).
Los últimos días previos al domingo 22 de octubre serán decisivos para saber qué pasará, dado que podrían condicionar fuertemente el humor electoral. Se viene una elección reñida con final abierto.
- https://www.ambito.com/espectaculos/segundo-debate-presidencial-2023-como-fue-el-rating-del-duelo-candidatos-n5841153 ↩︎
- Con la excepción, quizás, del candidato a presidente del oficialismo, Sergio Massa, quien buscó entablar un debate más propositivo ↩︎